domingo, 24 de agosto de 2014

PAUTAS PARA PRIMEROS PASOS AL DEJAR DE CONSUMIR UNA SUSTANCIA



Una persona que lleva muchísimo tiempo consumiendo una sustancia, forma parte de ella. Con esto quiero decir que ven el mundo de forma distorsionada, es como ver a través de unas gafas de sol, sienten, piensan y se comportan a través de cómo perciben el mundo, a los demás y a ellos mismos.
Uno de los motivos, y creo que es vital averiguar esta parte del problema, es saber si esta persona ve alternativa de vida. Por ejemplo, una persona que tiene problemas con el alcohol y la funcionalidad de éste es saber manejarse en situaciones sociales, no se siente capaz de hacerlo de otra manera, sino es ingiriendo una cantidad de alcohol. Entonces, ¿para qué dejarlo, si es su forma de actuar?
Con esto me refiero a que si llega el momento en que toman la decisión de dejar de consumir, la línea de trabajo será a partir de la habituación del deslumbramiento que le produce cuando se quita las gafas de sol.
He aquí algunas pautas para ayudarle en sus primeros pasos:

  • Introducción a hábitos saludables: hablamos de necesidades básicas como el comer una dieta equilibrada o realizar higiene de sueño. Aquí entra también empezar a cuidarse y mimarse uno mismo.
  • Hobbies nuevos o hobbies olvidados: en el consumo pasan mucho tiempo en busca de la sustancia y consumiéndola. Al quitar esto, tienen mucho tiempo libre. Debemos buscar aquellas actividades para empezar que no les supongan mucho esfuerzo y que sean reforzantes. Podemos coger actividades que hacían antes o nuevos hábitos o aprendizajes.
  • Empezar a sentirse capaz: el hecho que hayan dado el paso es que han hecho algo muy valiente. Han sido capaz de hacer un antes y un después.  Plantearse pequeños retos y conseguirlos harán que te sientan bien y esto hará que vaya aumentando tu autoestima.
  • “No sé quién soy”: Cuando dejamos de consumir, uno se da cuenta que no se conoce 100%. Sabe que con el consumo era otro yo, como si tuvieran puesto un disfraz. Al quitárselo se sienten un poco a la deriva sobre su personalidad, poco a poco se irá formando un repertorio nuevo de comportamientos, sentimientos y conductas.
  • Personalidades comunes: la impulsividad, la frustración al fracaso o la recompensa inmediata son algunos aspectos que hay que trabajar y cambiar.
  • Responsable de sus actos: empezar a responsabilizarse de él mismo, de lo que ha hecho, de qué dirección quiere tomar, qué quiere y qué no quiere hacer, son algunos aspectos que adquiere con responsabilizarse de sus actos, y esto hace que se sienta mejor con él mismo y mejore su autoestima y su autoconcepto.
  • Manejo de emociones: emociones como el aburrimiento o el enfado deben empezar a saber identificar y así poder combatirlas con habilidades de afrontamiento y no con el consumo.

Todos estos aspectos deben ser trabajados con la ayuda de un profesional. Es la primera fase de la deshabituación. Más información:  www.ivane-adicciones.com

domingo, 17 de agosto de 2014

APOYO A FAMILIARES EN EL PROCESO DE UN ADICTO EN PERIODO DE ABSTINENCIA



Cuando un familiar ha pasado varias veces por las misma situación, sobre todo cuando ha habido varias recaídas por parte del adicto, es difícil volver a creer en él. Pero hay algo dentro de ellos que hace que lo vuelvan a intentar y no abandonarlo.

En terapia de familia veo mucho el hecho de que es difícil pedirle a un familiar que confíen en él, que lo que necesitan es apoyo, ¿pero ellos qué?

He aquí algunas pautas para guiar tanto al adicto como al familiar a manejar este periodo de tiempo, sobre todo, al principio de su periodo de abstinencia:

  • Dar el paso al ingresar a un centro de desintoxicación: Tiene que haber un antes y un después, si han tomado la decisión de dejar el consumo para poder desintoxicarse y cambiar las cosas. El apoyo familiar es sumamente importante en esta decisión. Cuando uno da el paso, normalmente es porque ha sucedido algo que les ha hecho reaccionar. Por ejemplo, su pareja le ha echado de casa, o la ha dejado, pérdida de trabajo, deudas, etc. La idea es dar mensaje de que han tomado una decisión importante y que son unos valientes
  • Manejo de reproches: Sabemos que tarde o temprano, el familiar le exigirá que le dé explicaciones, se desahogará de tal manera que aparecerán muchas emociones negativas. Es importante el aprendizaje de la asertividad en estos momentos, poder expresar sentimientos y pensamientos a la otra persona sin llegar a una discusión
  • Racionalizar los pensamientos automáticos: Imagínate que vais a tomar algo, y tu pareja, que consumía cocaína te dice que se va a l baño. En ese momento se ponen las alarmas encendidas y tu pensamiento automático es que va a consumir. Esto es absolutamente normal, ya que es lo que ha pasado durante mucho tiempo. Intenta pensar que hay más alternativas al pensamiento y que el adicto ha hecho una serie de cambios que se muestran poco a poco, dale una oportunidad de ver que no es como tu pensamiento automático decía
  • Ya no hay escusas: En situaciones en las que el familiar pida explicaciones porque no se fía, el adicto debe tener paciencia frente a esta situación y hacer uso de la empatía, ponerse en el lugar del otro y entender que es normal que se pongan de sargento al principio. Cuando suceda, tienes que expresar que entiendes perfectamente que desconfíe
  • Negociar situaciones: Si sabes que tu familiar puede pensar mal si llegas tarde a casa, por ejemplo, acordar que si sucede esto se llame por teléfono para avisar que vas a llegar media hora tarde por x motivo
  • Ir ganando confianza: Poco a poco y a medida que va pasando el tiempo, si el adicto va demostrando mediante conductas que va por buen camino, el familiar debe hacer el esfuerzo de disminuir esa desconfianza
  • Reforzar las conductas saludables: Estamos acostumbrados a discusiones y reproches pero poco a expresar sentimientos positivos frente a situaciones que nos agradan. Si vais a tomar un helado y están a gusto con la persona hacerlo saber, exprésale que lo ves bien, mucho más tranquilo, feliz, que vea el adicto que notas el cambio y eso refuerza
  • Fomentar un ambiente agradable para una buena comunicación: Si hay un ambiente donde se habla y se expresa sentimientos, al adicto no le costará expresar que ha tenido un craving (deseo de consumir) y que lo ha podido manejar. El familiar debe tener claro que esto puede suceder. Aquí es cuando el familiar debe actuar desde el punto de vista de la empatía y del apoyo, recordándole lo mucho que se está esforzando y entendiendo que cuesta mucho mantenerse al margen
  • La decisión es suya: El familiar tiene que tener en cuenta que la decisión de continuar abstinente es del adicto al final

El proceso de la abstinencia es difícil, pero con un bueno apoyo familiar hay más probabilidades de superarlo. ¡Ánimo!

domingo, 3 de agosto de 2014

HABLEMOS DE… ADICCIÓN AL SEXO



Una adicción no química es el uso inadecuado de una conducta que podríamos llamar “normal” o incluso saludable. Puede ser por frecuencia que es el caso de la adicción al sexo o al móvil, o también, un uso inadecuado por duración, cantidad, intensidad o por cantidad de dinero, en el caso de ludopatía.
La adicción al sexo es un patrón adaptativo de la conducta sexual que provoca malestar clínicamente significativo.
A diferencia de las adicciones por sustancias, la dependencia no es fisiológica, solamente psicológica. Es una de las razones del porqué las personas que rodean al adicto no comprenden cómo es posible que no dejen de realizar la conducta en sí si les perjudica.
La adicción al sexo, también provoca tolerancia, la conducta aumenta. El pensamiento obsesivo sexual y las fantasías se hacen cada vez más necesarios para lidiar con los problemas del día a día. Se puede llevar una vida sexual muy activa y no por ello tener una adicción.  
Y dependencia, cuando no se realiza provoca malestar psicológico: irritabilidad, nerviosismo, ansiedad, estado de ánimo bajo, etc. Interfiere en mayor o menor medida en la vida de la persona que lo sufre, en todos los ámbitos.
Aparece la manipulación, las mentiras, la justificación incluso racionalizan sus actos, parecido a las adicciones a sustancias.
¿Por qué se mantiene el problema? La persona, al realizar la conducta, alivia el malestar psicológico como es la ansiedad o el estrés, eliminando el mismo de la dependencia psicológica. Importancia de la pérdida de autocontrol que domina a la persona.
La adicción al sexo es más habitual en hombres que en mujeres. Las mujeres tienen sentimientos de culpabilidad por la anormalidad de la conducta. La conducta adictiva puede ser con prostitución, líneas calientes, masturbación compulsiva, constante promiscuidad, etc.
Puede llegar un punto en que las conductas sexuales impliquen riesgo para su salud, por transmisión de enfermedades como el VIH.
Puede aparecer el llamado “Complejo de Don Juan”, cuando busca una conquista sexual o el “Complejo de Casanova”, además hay un punto afectivo en la conquista.

¿Cómo podríamos normalizar la conducta adictiva?

  • Evitar tener relaciones sexuales por aliviar un malestar anterior como emociones negativas, por ejemplo enfado, sino, tenerlas por placer con la otra persona
  • Si la persona tiene pareja, mantener relaciones consentidas y sólo con ella
  • Acordar con la pareja frecuencia de relaciones sexuales
  • Cuando haya masturbación imaginar situaciones reales, no uso de pornografía u otros
  • Aumento de la comunicación en pareja
  • Aprender a controlar a las emociones negativas de una forma alternativa

Como cualquier adicción, es un trastorno que con ayuda de un profesional te puede ayudar a superarlo.